La etiqueta "AAA" en el desarrollo de juegos está obsoleta y es irrelevante, según muchos desarrolladores. Inicialmente significaba presupuestos masivos, alta calidad y bajo riesgo, pero ahora se asocia con una competencia impulsada por las ganancias que sofoca la innovación y la calidad.
El cofundador de Revolution Studios, Charles Cecil, califica el término de "tonto y sin sentido", una reliquia de un período en el que el aumento de la inversión editorial afectó negativamente a la industria. Señala a Skull and Bones de Ubisoft, inicialmente promocionado como un título "AAAA", como un excelente ejemplo del fracaso de este sello para garantizar el éxito. Una década de desarrollo finalmente resultó en un lanzamiento decepcionante.
Las críticas se extienden a los principales editores como EA, acusados tanto por jugadores como por desarrolladores de priorizar la producción en masa sobre la participación de los jugadores.
Por el contrario, los estudios independientes suelen producir juegos que superan el impacto de muchos títulos "AAA". Juegos como Baldur's Gate 3 y Stardew Valley resaltan la importancia superior de la creatividad y la calidad por encima del simple presupuesto.
La creencia predominante es que una mentalidad de priorizar las ganancias restringe la creatividad y desalienta la asunción de riesgos, lo que en última instancia obstaculiza la innovación en el desarrollo de juegos a gran escala. La industria necesita un cambio de paradigma para recuperar el interés de los jugadores e inspirar a una nueva generación de creadores.